miércoles, 24 de julio de 2013
A UN CADÁVER
Atávico pensamiento
sobre el ataúd con tu cadáver
lánguido y gris
sin la más mínima expresión
de sorpresa conociendo
el otro lado del espanto.
Azufradas las velas
con una llama rígida como tu cara
casi pegada al vidrio
de la tapa con ganas de gritar
¡sáquenme de aquí!
que no respiro.
Nostálgico minuto
si para todo tenías una sonrisa
y al mirarte reposado,
un poco distraido de tu muerte
la sonrisa se ocultó en la funda
de la almohada que es tu cabecera.
Y pasó la muerte, tu muerte.
Conversó contigo,
y caminaron sin destino...
OFICINA
Aspas en círculos
tragándose las horas...
Libros de vacaciones
en los estantes...
Escritorios soportando
el peso de las cuentas...
Movimiento constante
de empleados...
Teléfonos estrépitos
imprudentes...
Y yo,
enamorando la prosa
para dibujarte...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario