martes, 12 de febrero de 2013
Dejaste la vida,
lejos de los sueños de amor,
las botas amarillas
pesaron más...
FRENTE A L A CASA
Sobre el alambre
palomas y zanates
formaron un pentagrama,
las guacalchías
entraban por el patio
a husmear en la cocina;
al frente la cordillera
recordaba el bálsamo
de fondo Jim Croce sonaba,
la calle parecia
un cementerio,
a lo lejos
en el centro de Tecla
el ruido de diesel
y gasolina,
la mañana fresca
con su sonrisa
de niña quinceañera
me decia
que era mío
todo lo que me rodeaba,
por algo el volcan
me recordaba
su altura,
el volswagen
y la moto
en la cochera de la casa
eran parte del entorno
que me hacían sentir bien
que no quería
que se me fuera el instante.
Una ardilla
hacia equilibrio
en otro alambre,
yo por mi parte
describiendo
en esta vivencia
lo que enseñaban
mis ojos.
Casi olvido
la palmera
queriendo vivir;
lo único que
no entonaba
era el poste
de una compañía
telefónica...
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